En México, las empresas se pueden registrar de diversas maneras, siendo las más comunes la Sociedad Anónima (SA) y la Sociedad de Responsabilidad Limitada (S de RL). Ambas formas tienen ventajas y desventajas, y la elección de una u otra depende de las necesidades de la empresa. A continuación, se presentan las principales diferencias entre estos tipos de empresas en México.
-Sociedades Anónimas: Son aquellas en las que los socios no responden personalmente de las obligaciones sociales. La responsabilidad de los socios se limita al monto de las aportaciones que hubieren realizado.
-Sociedades de Responsabilidad Limitada: En estas sociedades, la responsabilidad de los socios está limitada al monto de las aportaciones realizadas.
-Sociedades Cooperativas: En estas sociedades, los socios son los propietarios y gestores de la cooperativa. La finalidad de las cooperativas es la satisfacción de sus necesidades, sin obtener un beneficio económico.
-Sociedades Civiles: Son aquellas en las que los socios responden personalmente de las obligaciones sociales.
¿Cuáles son los tipos de empresas según su forma jurídica?
El primer paso es entender qué es una empresa. Según la RAE, una empresa es «una institución económica que tiene como finalidad la producción o intercambio de bienes o servicios con objeto de obtener un beneficio».
Aunque todas las empresas tienen el mismo objetivo, existen diferentes tipos de empresas según su forma jurídica. A continuación, vamos a ver cuáles son los principales tipos de empresas que podemos encontrar en España.
En conclusión, existen diferentes tipos de empresas según su forma jurídica. Aunque todas ellas tienen el mismo objetivo, cada una de ellas tiene unas características y unos requisitos específicos.
¿Cómo se clasifican las empresas en México de acuerdo a su régimen jurídico?
Las empresas en México se clasifican de acuerdo a su régimen jurídico en cuatro grandes grupos:
Empresas mexicanas según su forma jurídica
Aunque México cuenta con una gran variedad de empresas, la mayoría de ellas se encuentran en uno de estos tres tipos: sociedades annónimas, sociedades de responsabilidad limitada y sociedades cooperativas.
Las sociedades annónimas son las que cuentan con el capital social más alto y son las que se encuentran en el índice bursátil de la Bolsa Mexicana de Valores. En general, estas empresas están controladas por un grupo reducido de accionistas y tienen una estructura jerárquica más compleja.
Las sociedades de responsabilidad limitada, por otro lado, se caracterizan por tener un número reducido de socios, que responden únicamente hasta el monto de su aportación. Esto quiere decir que, en caso de que la empresa tenga problemas financieros, los socios no serán responsables de las deudas contraídas por la misma.
Por último, las sociedades cooperativas están formadas por un grupo de personas que se asocian para satisfacer una necesidad o realizar una actividad económica determinada. En este tipo de empresas, todos los socios tienen iguales derechos y obligaciones, y la gestión está a cargo de un consejo de administración elegido por ellos mismos.
Las empresas mexicanas según su forma jurídica son muy buenas y seguras.